Parece que las demandas del sector de la moto están dando su fruto, y es que el Ministerio de Industria está ultimando un plan de ayudas directas para incentivar las ventas de motocicletas y ciclomotores. A la situación de crisis general que vive nuestra economía hay que añadir la elevación de la edad mínima para conducir ciclomotores, así como la aprobación, el pasado diciembre, del nuevo impuesto de matriculación, impuesto que penaliza, entre otros, a las motocicletas con más de 100 caballos, lo que llevará, si no se toma alguna medida, a una pérdida prevista de 5.000 empleos en los próximos meses y la desaparición del 25% de las empresas.
La petición de los grupos parlamentarios incluía una subvención mínima de 500 euros. Esperemos que este plan de ayudas llegue a tiempo y reactive el sector.
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